"Espero que vivas todos los días de tu vida"

lunes, 8 de marzo de 2010

Capítulo 50 - CAZADORES DE MENTES


El "peligro" ya ha pasado. Incluso él le ha hecho algo de comer a ella mientras hablaba con su madre. Después los tres se han ido del salón y se han puesto a discutir sobre cual era la mejor película para ver una tarde como esa. La ganadora: Cazadores de mentes. Una película de suspense y acción, que curiosamente, ha sido recomendada por ella. Los otros dos han cedido. 

Ángel está tirado en el sofá más grande. Donde sin ningún tipo de esfuerzo cabrían dos personas. Ella se ha puesto en un sofá la mitad que ese. 
Después ha llegado él y ha visto el panorama. Le ha dado igual. Se ha sentado al lado de ella sin dudarlo. Ella entonces se ha dado cuenta de la jugada de él, al ver todo el sitio que queda libre en el otro sofá. Sonríe para sus adentros. Le gusta que él se siente a su lado. Le encantaría besarlo. De hecho, no lo besa desde hace tiempo y hoy está guapísimo. 

Sara - la novia de Ángel - ha llegado unos minutos después. Se ha tirado al sofá con su novio y se han acomodado haciéndose carantoñas. Ellos dos, los han contemplado celosos. Les encantaría poder hacer eso con la misma facilidad, pero no. Él no hace nada y ella tampoco. Solo se miran y sonríen. 

Apagan las luces, la película empieza. Aunque para ellos no mucho. Pasan los minutos y solo piensan en como acercarse más el uno al otro. 
¿Y si le agarro la mano?, piensa él. ¿Y si le digo que se acerque a mí?, piensa ella. Pero ninguno de los dos se lo dice. Al cabo de un rato, los dos están más cerca el uno del otro. Han ido acercándose disimuladamente. 

Es curiosa la forma de ser que tienen. Son orgullosos, no lo reconocerán nunca... Se sienten los dos frustrados. Pero tal vez tenga que ser así. En cierto modo, ahí es donde se encuentra la magia de esta historia. En "el qué pasará". 

Cuando la película termina los cuatro suben de nuevo a la habitación para recoger las cosas de Ángel. 

- No... Ja, ja, ja... Pregúntaselo tú.. - Dice Sara a su novio 
- Esto... tío. Tendría que ducharme... ¿Te importa? - Le dice Ángel a él 
- Que va, adelante... 
- Necesitaría la ayuda de Sara... - Añade Ángel
-Ja, ja, ja... ¡Eres un capullo salido! ¡Hacer lo que queráis! 
- Pero recordar que sus padres... sí que entran... - Bromea ella 

Los dos se marchan de la habitación camino a la ducha. Y al fin. Llega el momento que ellos más estaban esperando: Se quedan solos. 
Ella está tumbada en la cama donde ha dormido con él tres noches seguidas. Mira al techo
- ¿Tienes sueño? 
- No. Solo estoy relajado - contesta él desde la cama de al lado 
- Yo también... estoy relajada 

Se da cuenta entonces de lo que ha dicho. Yo también, yo también estoy relajada. Y recuerda lo que era ella unos meses atrás. la cabeza por un instante le da vueltas. Recuerda el sufrimiento, sus brazos, sus lágrimas amargas. Recuerda al cupable de todo ese sufrimiento y entonces se gira para mirarlo a él. 
Allí está con los ojos cerrados. Tan dulce, tan tranquilo como siempre...

- ¿En qué piensas? - Le pregunta finalmente él a ella
- Nada, en cosas no muy agradables...
- Siempre hablas de un pasado "oscuro". Pero nunca quieres comentarlo con nadie...
- Bueno, todos tenemos partes de nuestro pasado que nos gustaría olvidar
- ¿Sabes? Puede que cuando te sientes triste muchas veces tienes la necesidad de querer borrar algunos recuerdos que te ahogan. Pero una vez que pasa el dolor, te alegras de que sigan en tu cabeza para no volver a cometer los mismo errores... para darte cuenta de quien eres ahora gracias a ellos... Yo no borraría nada de mí vida...
- ¿Y qué me dices de esa chica con la que estuviste tres años? - pregunta ella finalmente. Es la primera vez que ella le pregunta por su ex a él.
- ¿Cómo sabes eso? - Pregunta él intrigado
- Bueno, tus amigos... lo comentan algunas veces... - Dice ella intentando no parecer demasiado interesada.
- Pues no borraría su recuerdo tampoco. ¿Sabes una cosa? Me di cuenta de que estaba enamorado de ella en esta habitación... - Cuando hablo así de su ex, ella sintió que se le encogía el pecho solo de imaginarlo con otra persona. Sintió miedo. - ¿Y tú con tu ex?
- Mi ex... no se portó muy bien conmigo.
- ¿Te hizo daño no? - La mirada de ella lo confirma - Bueno, a mí, mi ex también. Pero sin embargo... ahora que ha pasado el tiempo, me doi cuenta de que una de las mejores cosas que he hecho en la vida, fue dejar esa relación.
- A mí también me pasa lo mismo... - Dice ella mientras se gira en la cama para mirarlo a él desde la otra. Después le sonríe.

- ¿Y ahora qué? - Pregunta de nuevo él
- ¿Ahora qué de qué?
- Que hoy en día como te sientes...
- Últimamente me siento feliz...
- Eso es por que yo he aparecido en tu vida - Bromea él. Aunque no está tan confundido...

Ella se da cuenta de que es así. Él se da cuenta de lo que ella está pensando. Y mientras abajo una pareja de novios ríe y se ducha. Él piensa que porque no se besan, ella sin querer piensa lo mismo.

- ¿Solo me besas porqué estás borracha? - Dice él finalmente
- ¿Cómo? - Dice ella nerviosa y desprevenida
- Sí. Solo me besas cuando te pones borracha. Como entretenimiento, ¿No es así?

Ella no sabe que contestarle. Aunque sí que sabe perfectamente lo que siente. Si se sintiera completamente libre le diría que le gustaría hacerlo ahora. Pero no se siente capacitada para poder ser sincera de ese modo. Así que intenta darle la vuelta a la tortilla

- Podría decirte lo mismo a tí, listo. ¿Por qué solo me besas cuando te pones borracho?

Él es el que siente ahora incomodidad. Aunque también conoce la respuesta. Es la misma que la de ella.

- No se porque he preguntado esto... Mejor olvidémoslo - Dice él
- No, ahora quiero saberlo...
- Calla... lo estropearás... - Dice él mientras se acerca a ella y le pone un dedo en los labios mandándola callar. - Ahí es donde se encuentra la magia... En no saberlo todo - Y después sonríe.
- A lo mejor a veces las palabras sobran... - Contesta ella apartando despacio la mano de la mano de su boca... - un simple gesto... una mirada... un beso nos dicen todo lo que hace falta decir en silencio... - continua mientras se va acercando despacio a él...

Él no se aparta. Sigue mirándola fijamente a los ojos en esa habitación. Todo está en silencio, solo se oye el ruido del acercamiento de ella. Sus labios se acercan a los de él... el respira suavemente... ella cierra los ojos...

- ¡Tío no me acordaba! ¿Mañana... no es tu cumpleaños? - Dice la voz de Ángel subiendo por las escaleras.

Los dos se separan rápidamente. El momento se rompe por completo. Los dos pierden lo que tenían. Se miran durante unos segundos efímeros y se giran para contestar a Ángel que no se ha dado cuenta de que ha estropeado un deseado beso.

- Sí... - Contesta finalmente él
- ¿Es tu cumpleaños? - Pregunta entonces ella...
- Sí, el último día de fiestas es su cumpleaños ¡Esta noche tenemos que salir para despedirnos! - Dice Ángel feliz

Él sonríe pero no está a lo que está. Ella siente algo parecido. Solo que la preocupación aumenta cuando se da cuenta: ¿Qué se le regala a alguien tan especial como él por su cumpleaños? 

2 comentarios:

  1. Te quiero Guiye!! =)

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  2. Profesor particular a domicilo!8 de marzo de 2010, 17:16

    Me encanta este capitulo, me encanta que escribas esto, me encanta que te acuerdes de todo, me encanta como escribes (creo que vales para ello) y sobre todo me encantas TÚ!

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