"Espero que vivas todos los días de tu vida"

viernes, 15 de octubre de 2010

Capítulo 73 - Halloween: noche de "brujas"


"Existe un día del año... en el que la gente visita el cementerio para ver a los que "ya no están", en el que las floristerias aprovechan para hacer subir  su negocio, donde los niños piden caramelos o tiran huevos. Ese día... donde las personas se disfraza de algo siniestro, malvado... como brujas o villanos. Sí, hablo del 31 de Octubre: día Halloween, la noche de los muertos vivientes. El problema que tiene halloween es que como todos están disfrazados, no podemos diferenciar a los malos de verdad. A esos que se encuentran camuflados entre la multitud... "

Era la una del medio día cuando el telefono de ella sonó. Esa melodía la ponía nerviosa. Era la típica musiquilla que venía ya incorporada con el móvil. Nunca perdía el tiempo en cambiarla porque solía cambiar más de móvil que de calcetines. Sí, perdía el móvil con una frecuencia espantosa. Pero este, es otro tema... ¿Por dónde íbamos? ¡A sí! decía que la estaban llamando al móvil...

Ella corrió rapidamente apartando toda la ropa que tenía encima de la cama hasta que finalmente, escondido en lo más profundo de una camiseta revuelta allí estaba

- ¿Sí? - pregunta sin que le haya dado tiempo a mirar quien la llama - ¡Hola Ana! ¿Qué tal estas?
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- ¡Bien! Con un plan que proponerte... - Contesta Ana con un tono misterioso... - ¿Sabes que día es hoy, no?
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- Creo que se lo que estás pensando...
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- ¿Y bien?
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- ¡No tengo nada!
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- ¡Oh vamos!, claro que sí que lo tienes, he pensado que podríamos ir de brujas. Una camiseta vieja, alguna media rota... ¡Está chupado! Podría ir a comprar unos gorros que he visto en una tienda de disfraces no muy lejos de mí casa. ¡Di que sí! ¡Nadie sale hoy! - Contesta Anna con un tono entusiasmado
------------------------------------------------------------------------------------------------------------
- Bueno... ¡Esta bien! Además se me acaba de ocurrir una idea para las medias genial. Verás...


En una calle estrecha. Con edificios algo manchados y viejos, haciendo esquina, al lado de un bar donde ponen el pincho de tortilla a un euro cincuenta están ellos.

- ¡No! ¡No! ¡Mejor de Babtman! - Dice el más grande de todos dándole un sorbo al café. La imagen resulta cómica
- ¡Lo veo! - Contesta Moreno - ¡Pero tendríamos que comprarlo con relleno! ¡Así daremos una imagen´de más cuadradillos!
- ¡Spiderman! ¡Oh sí tío! ¡Sí! - Contesta Angel mientras se imagina el disfraz puesto en él - Mejor... ¡De hombre invisible!
- Ja, ja, ja ¡No puedes hacerte invisible Angel! Tendrás que conformarte con el de Spiderman - Le dice él sonriéndole.
- ¡Siempre quitándome la ilusión tío! ¿No puedes dejarme ser feliz? - Dice Angel mientras se apoya frustrado en la mesa
- Eh, eh, modernillo, ponnos otra ronda más - Dice Moreno indicándole al camarero
- ¿Otra? - Pregunta él - ¿De dónde sacas la pasta hoy tío?
- Trapicheos del negocio... trapicheos...
- ¡Bueno entonces de que nos disfrazamos! - Dice de nuevo el más grande
- Tengo algunas ideas... si nos pintamos la cara con algunas cuantas ropas rotas... podríamos ir de fantamas o de zombis...
- ¡Ah! Pues no esta mal...

El reloj marca ya las 10 de la noche. Ella intenta recordar cual era el portal correcto. Al final lo recuerda, llama al timbre, Anna contesta y ella sube al piso. Conoce a los padres y al abuelo y van a su habitación. Ella vacía toda la bolsa con trapos y disfraces y la otra saca los suyos. Después de algo más de una hora ya están vestidas. Mejor dicho, disfrazadas de dos frujitas. Anna lleva un vestido negro y se ha hecho unas medias moradas con topos. Ella lleva unas medias rojas con una mini falda negra que parece un tutu. Las dos llevan un gorro grande de bruja y una mini escoba. No les ha quedado mal. Ella se siente contenta, hacía mucho tiempo que no se divertía así. Está nerviosa, sabe que lo verá a él y le resulta extraño pensarlo. Se siente en cierto modo, "Sola ante el peligro". Pero sobrevivirá, siempre lo hace. Además, Mónica no estará y será más fácil el buen ambiente. ¿Cómo hirá él? ¿Estará guapo?, piensa.

Un taxi las deja haciendo esquina en un puente. Ella no conoce muy bien la zona, de hecho no está segura de si ha estado alguna vez allí.

- En esta calle a un amigo de mi hermano le amenazaron con una pistola -Dice Anna completamente tranquila mientras anda. Pues No, seguro que ella no había estado allí antes.
Terminando de cruzar el puente divisan a lo lejos una siluetas de un grupo numeroso. Parecen ellos. Pero es extraño, también se oyen voces de chicas

- Oh no... han venido - Dice Anna mientras la mira trágicamente
- ¿Quienes han venido?
- La tropa de las "divinas" esas... del barrio
- ¿Divinas?
- Sí. Las odio. Son malas, una de ellas creo recordar que te mintió diciéndote que él tenía novia ya, ¿No? Una de sus amigas...
- Sí es verdad -Dice ella mientras entorna la mirada hacia el grupo de gente intentando divisarlas ahora ya más atenta
- Pues nena, más vale que sepas que van a muerte a por todos. Especialmente a "tu chico..."
- ¿Quién? ¿Mi chico?,  ¿Él? Oh vamos él no es mí... - Y durante un segundo lo piensa, ¿Es sú chico? ¿O no lo es? ¡Nunca lo han hablado! Llevan un tiempo viéndose, viviendo cosas irrepetibles, inolvidables. Pero nunca han hablado sobre lo que son, nunca han comentado entre ellos lo que sienten el uno por el otro. Se queda helada. ¿Y si alguna de esas chicas ha estado con él mientras estaba él con ella? Al fin y al cabo no sería tan raro. Puede que el la viera como su royito. Como otra chica más. Puede que al fin y al cabo la estubiera mintiendo como ya había hecho anteriormente con las otras. ¿Por qué ella diferente? ¿Quería aprovecharse de ella? Se sintió aturdida. No sabía a que contestar, no tenía las respuestas. Puede que lo que le huviera dicho hasta el momento hubieran sido solo eso, palabras. ¿Ella quería que él fuera "su" chico? ¿Acaso él sí? ¿Y si se daba cuenta de que sí lo querí...? ¡No! No podía estar pensando en esa palabra... ¡No era posible! Para que a ella le gustara un chico de verdad tenía que pasar un tiempo, algo que le indicara que era para ella...

- ¿Hola? Despierta bella durmiente... - Dice Anna mientras habla entre dientes y le propina un codazo mirando hacia el frente sonriendo exageradamente hacia el grupo. - Estamos aquí ya... - Susurra de nuevo - ¡Hola chicos! - Y deja de laso a las otras chicas sin molestarse en saludarlas
La gente se gira para mirarlas están todos allí. Ella lo busca con la mirada. No está. ¿Dónde se ha metido? Empieza a ponerse nerviosa. Angel se hacerca a ella algo borracho ya y le da dos besos. También saluda a otras personas. Una de las supuestas divinas, también borracha se acerca a ella

- ¡Te había visto en fotos! ¡Eres mucho más mona al natural! - Le dice. Parece simpática. Pero otras no tanto. Sus caras no son igual de amables. Se comienza a cuchichear y la situación se vuelve algo incómoda. Ella levanta la mirada y entonces lo vé. Viene con una de ellas. Los movimientos son escurridizos. Nadie los había echado en falta -solo ella- y se incorporan al grupo con total normalidad. Nadie se inmuta. Él la vé, que brujita sexy, piensa mientras se acerca a ella.
Ella lo mira a él. Tiene la cara pintada con un aspecto pálido y lleva ropa vieja, bohemia. Su disfraz es interesante, parece un fantasma malo pero también angelical. Su cara perfecta, lisa y palida con sus ojos castaños cran un contraste puro, dulce, tierno. Su ropa esta rota sí, pero huele a caramelo.

- Nunca dejas de sorprenderme... - Dice él mientras la mira. Ella lo mira a él. Se hace el silencio por unos instantes.

Entonces una de las chicas le agarra por el brazo emocionada intentando contarle algo. Él aparta la atención de ella y atiende a las chicas. Ella se queda allí mirando. Y sin saber muy bien porque, siente algo extraño en ella. Siente un cosquilleo, aprieta los dientes, se siente tensa, las mira y sin saber porque esas chicas ya no le caen bien. Y lo mira a él y siente que está enfadada. Sí, se siente celosa. Pero no sabe que hacer, como es lo típico en estos casos. Cuando alguien te gusta demasiado no puedes pensar. Su decisión: irse con Anna.

La noche va pasando. Ella no habla demasiado con él. Más bien nada. Lleva toda la noche hablando con esas "pesadas", según ella. Se hace fotos con ellas. Ellas lo agarran y el se deja querer. No hace nada malo, pero ella se siente ofendida. Se siente tonta, estúpida por haber decidido ir allí para verlo. No sabe que hacer. Solo sabe que se alegra de tener a Anna a su lado para desaogarse con ella. Ella le cae bien, se rien juntas, se cuentan cosas juntas. Y aunque parecen dos chicas diferentes tienen bastantes cosas en común.

- Tranquila, suele hacerlo. Pero yo creo que esta vez lo hace para llamar tu atención - Dice Anna tranquila mientras bebe un sorbo de su vozka con limón.

Ella también bebe otro sorbo de su vaso con lo mismo y hablan allí las dos sentadas en el suelo apoyadas en la pared. Entonces, él se acerca a ellas y se sienta allí. Su actitud es despreocupada, apoya su brazo en su pierna que esta lebantada y flaxionada. La otra mano apoyada en el suelo al igual que su pierna. También bebe. Parece J&B.

- ¿Qué tal chicas? - Dice feliz y sonriente.

Ella lo mira con odio fijamente. El también a ella. Sin saber muy bien porque los dos se retan.

- ¡Bien! jijiji - Dice Anna feliz poniendo su risilla borracha
- Bien... - Contesta ella fingiendo no estar preocupada
- Pues yo... ¡También bien! ja, ja, ja - Dice él bromeando - Una conversación para tontos... interesante...
- Sí, realmente interesante - Contesta ella
- ¿Nada más que decir? - Pregunta él
- Nada más - Le dice ella con una sonrisa claramente irónica.

Él se marcha. Sabe que a ella le pasa algo. Que está enfadada, aunque no consigue descifrar del todo que es lo que le pasa. "Mujeres... nunca las entiendo como ellas quieren", piensa. "Tal vez ese sea el motivo por el cual lo han pasado mal por mí". Y vuelve donde estaba. Sus amigos le hablan. Una de las chicas se le acerca. La mira varias veces, le apetece acercarse a ella, besarla delante de todos los demás de una vez por todas, pero ella, ella parece que está allí solo porque quiere ver a Anna. Cada vez que la mira la ve reirse. ¿Es que a caso no le preocupa en absoluto estar mal con él? Que envidia. A él resulta imposible seguir disfrutando del resto de la fiesta sabiendo que ella puede que este pensando algo malo. ¿Y si lo que le pasa es que se ha cansado de él? ¿Y si no sienten lo mismo? ¿Y si habla de otro? ¿Qué le estará contando a Anna?. "Agg, y cada vez que la miro ella no me esta mirando. No me devuelve la sonrisa, no para de reirse. Se lo está pasando bien y yo no puedo... joder," piensa.

- ¿Está mirando? - Pregunta ella a Anna entre dientes. Anna mira de reojo y ve que sí
- Ajam...

Y las dos fingidamente se ponen a reír. ¡Ai el amor! Si supieramos estas cosas cuando nos enamoramos ¿verdad? Sufriríamos mucho menos. Seguro que si ellos hubieran sabido esto se habrían levantado, encontrado el uno con el otro. Se habrían mirado y lentamente, delante de todo el mundo se habrían besado. Pero no queridos lectores, esto no funciona así. La noche, no había hecho más que empezar para ellos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario